Quito, abril de 2025.- La sostenibilidad ha dejado de ser una opción para convertirse en una prioridad global, y el mercado inmobiliario ecuatoriano comienza a alinearse con esta nueva realidad. Cada vez más compradores buscan viviendas ecofriendly y autosustentables que integren eficiencia energética, gestión responsable de recursos y una menor huella ecológica.
La combinación de ahorro energético, independencia de fuentes convencionales y compromiso con el medio ambiente está motivando una transformación en las preferencias habitacionales del país. Según del portal de clasificados de real estate, Plusvalía, este tipo de propiedades están diseñadas para generar su propia energía, optimizar el consumo de agua y minimizar residuos, todo sin comprometer el confort ni la estética.
Entre las características más destacadas de estas viviendas se encuentran:
- Energía Renovable: incorporación de paneles solares y sistemas eólicos que permiten reducir costos y emisiones contaminantes.
- Gestión Hídrica Eficiente: captación de agua de lluvia, filtración natural y plantas de tratamiento para reutilización doméstica.
- Materiales Ecosostenibles: uso de insumos reciclables, biodegradables y de bajo impacto ambiental en la construcción.
- Tecnología Inteligente y Aislamiento: domótica, ventilación natural y aislamiento térmico que optimizan el consumo energético.
- Áreas Verdes y Producción Local: huertos urbanos, techos verdes y biodigestores que promueven la autosuficiencia y el bienestar.
Una evolución que gana terreno en Ecuador
Ciudades como Quito, Guayaquil y Cuenca ya están incorporando criterios de sustentabilidad en nuevos proyectos habitacionales. Promotores y desarrolladores reconocen el potencial de este segmento en crecimiento. De hecho, según un informe de la consultora Knight Frank, a nivel global el 71% de los compradores de alto poder adquisitivo consideran que las credenciales sostenibles influyen en su decisión de compra, una tendencia que empieza a reflejarse también en el mercado ecuatoriano.
“El nuevo comprador está mejor informado y tiene mayor conciencia sobre el impacto de su estilo de vida. Busca viviendas que no solo sean modernas y funcionales, sino también respetuosas con el entorno”, afirma Marcus Da Fonseca, gerente de marketing de Plusvalía.
Además del beneficio ambiental, estas viviendas ofrecen ventajas económicas significativas. Estudios de la International Energy Agency (IEA) indican que una vivienda con eficiencia energética puede reducir hasta en un 30% los costos de servicios básicos, generando ahorros sustanciales a largo plazo.
Las viviendas autosustentables ya no son una visión futurista, sino una realidad cada vez más presente en el mercado inmobiliario nacional. Representan una oportunidad para repensar la forma en que habitamos, construir comunidades más resilientes y dar un paso firme hacia un desarrollo urbano verdaderamente sostenible.