Preocupados por el creciente déficit habitacional que bordea las 500.000 unidades, y la tasa de desempleo existente en el país, varios actores de la construcción, nos reunimos para buscar alternativas que permitan sacar adelante al sector de la construcción.
La importancia del sector de la construcción, radica en su capacidad de generar empleo de manera inmediata, por cada 40 metros cuadrados de construcción, se crea un empleo directo por 18 meses, y si tomamos en cuenta empleo directo e indirecto, por cada 20 metros cuadrados de construcción, se genera un empleo por 18 meses.
Uno de los principales problemas que existen en el negocio inmobiliario ecuatoriano es la falta de crédito a constructores. La situación actual implica que el constructor logre obtener una línea de crédito alta, misma que encarece el proyecto y por tanto el precio de las viviendas se incrementa. Adicionalmente, existen otros problemas, los proyectos se alargan entre 6 y 8 meses luego de concluidos que los créditos hipotecarios se ejecuten al 100%. Otro inconveniente es que los créditos de los clientes se hacen al final y durante el transcurso muchas personas dejan de ser sujetos de crédito por sobre endeudamiento y finalmente al existir proyectos que no usan fideicomisos, pueden llegar a ser fallidos
En el Ecuador se inicia el proyecto “Construyamos Juntos”, basado en el modelo Bien Futuro que se aplica en Perú y que ha cambiado de manera radical al sector de la construcción, multiplicando las operaciones hipotecarias casi por 6:
- Todos los proyectos deben contar con fideicomiso en el cual el banco es parte de la junta.
- Los créditos a clientes se califican y garantizan desde el primer día.
- Los desembolsos parciales que se hacen por avance de obra van a una cuenta del fideicomiso una vez aprobado el informe de avalúo y fiscalización para ser invertidos en la construcción.
- Al existir certeza de flujo económico, los tiempos de construcción son más fáciles de cumplir.
- Una vez concluidas las obras, las viviendas son entregadas a los clientes de manera inmediata.
- El constructor puede hacer proyectos más grandes porque ya no depende 100% de su capacidad de endeudamiento.
Diferencias entre el crédito “Construyamos Juntos” y el crédito tradicional.-
El cliente que tome crédito “Construyamos Juntos”, pagará únicamente el valor de la entrada durante la construcción del proyecto, el crédito lo toma desde el día que se declara punto de equilibrio, y los desembolsos parciales que se hacen por avance de obra, irán a la cuenta del fideicomiso. Sin embargo, los intereses que por ese crédito se generen, los asumirá la constructora, de tal forma que el cliente empiece a pagar al banco, en el momento que recibe efectivamente la propiedad.
El cliente que tome crédito tradicional, debe cancelar la entrada a lo largo de la construcción, pero el precio de venta será sin descuento, adicionalmente, deberá tener listo su desembolso de crédito máximo a 45 días de la finalización de la obra.