- El sentido del olfato desempeña un papel crucial en las emociones, ya que es capaz de detectar fácilmente las feromonas, hormonas vinculadas a la atracción y el placer.
Quito, febrero de 2024. ¿Los olores son responsables de que haya “química”? Según un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Chicago, sí. El olor corporal de una persona puede influir en la atracción física y la percepción de su atractivo.
Tal es el caso que los olores también pueden repercutir en la forma en que una persona se siente alrededor de otra. De hecho, recientes investigaciones realizadas por académicos británicos, estadounidenses y japoneses demostraron que los participantes que inhalaban el olor de su pareja experimentaban una disminución en la actividad de las áreas del cerebro asociadas con el estrés y la ansiedad.
A lo largo de la historia el olfato ha sido catalogado como el sentido de la memoria y el deseo, y la industria lo ha entendido al utilizar aromas atractivos, desde perfumes hasta el aroma de productos horneados en supermercados, para influir en nuestras emociones y comportamientos.
Sandra Quintero, experta en el negocio de Aromas y Fragancias para BASF, indica que: «La industria química se dedica al desarrollo de aromas con el fin de mejorar el bienestar y la calidad de vida. Estas fragancias pueden influir en el estado de ánimo, aumentar la productividad y fomentar el bienestar emocional y físico de las personas. Al hablar de olor, nos sumergimos en procesos científicos, donde las partículas del olor viajan físicamente por el aire hasta ser percibidas por nuestro olfato. En este momento, nuestro sentido decide si la experiencia olfativa es agradable o no».
Desde la industria, las compañías se empeñan por superar el filtro de lo olfativamente placentero a través de sus productos, entre ellos BASF, el gigante químico alemán, utiliza tecnología única en el mundo que recurre a la fermentación basada en microorganismos para producir fragancias naturales e ingredientes aromatizantes a partir de materias primas renovables, lo que permite contar con todos los beneficios de los aromas y, al mismo tiempo, cuidar del planeta.
Una reciente innovación de la compañía química es Santalol, creado a partir de fuentes renovables europeas como alternativa sostenible al aceite de sándalo, proveniente de árboles en peligro de extinción. Satalol de Isobionics conserva la calidez y el volumen en fragancias, garantizando disponibilidad estable y facilidad de uso, contribuyendo a la sostenibilidad de la industria de fragancias y a la oportunidad de experimentar las fragancias como una opción de bienestar personal.